Los niños aprenden de una manera más efIcaz cuando se recurre a todos sus sentidos. la "atmósfera" constituye un elemento importante en el proceso de enseñanza. y sin embargo es difícil, si no imposible, definir o analizar esa atmósfera en relación con la comprensión de la historia por parte de los alumnos. Douglas McMurtrie afirma que el mundo de hoy es técnicamente complejo, funcional y carece de atractivo estético. sin embargo señala que:
hay embotellada dentro de nosotros un área emocional a la espera de brotar para que seamos plenamente humanos y sin embargo se le niega la oportinidad de expresión; el modo perceptivo-subjetivo de comprender no es menos respetable que el científico.
Estrategias: una sensación del lugar
- redacción ambientada. invite a los niños a que escriban, sentados en la casa, sobre las murallas del castillo, las pirámides, en una mazmorra o en la pz de un claustro. así resultará menos probable que elaboren un texto que empiece diciendo: "fuimos a Fountains. Yo iba al lado de Renata. Tomamos un helado".
- escuchar. siempre que resulta apropiado, incluya en una visita un "tiempo de escucha" durante el cual los niños, aunque quiza sólo por un minuto, permanezcan inmóviles y sentados, escuchando los sonidos que penetran el luigar.
- reflexión. ¿Qué hay de especial en este lugar?, ¿qué estado de mánimo trasmite?, ¿sugiere este edificio/excavación/ruinas algo de su propósito original?, (las preguntas varian de acurdo al con tenido que se estudie). Se puede imaginar aquí el desarrollo de un determinado acontecimiento.
- fotografía. Dé a los alumnos la oportunidad de fotografiar un elemento infrecuente que capte el pasado: la efigie de un monje en un capitel, un camino medieval cubierto por la maleza.